«La carpa colapsó por un lado, dejando atrapadas a personas que buscaron escapar de forma desesperada», contó Abdulá Jan. «Hubo una confusión total, había carne humana, restos de extremidades esparcidas y cadáveres«, relató el testigo.
Sabeeh Ulá, un simpatizante del partido de 24 años, dijo sufrió una fractura del brazo debido a la explosión. «Me encontré tirado junto a una persona que había perdido sus piernas, el aire estaba intoxicado con el olor de la carne humana», contó a AFP por teléfono.
Riaz Anwar, delegado del Ministerio de Salud en la provincia de Jaiber Pastunjuá indicó que hay 44 muertos y más de 100 heridos. «Fue un atentado suicida y el atacante se hizo explotar cerca del escenario», dijo el funcionario a AFP.
Las imágenes del lugar de la explosión que circulan en las redes sociales muestran cuerpos esparcidos y voluntarios ayudando a las víctimas ensangrentadas a subir a las ambulancias.
La Asamblea Nacional de Pakistán va a disolverse en las próximas semanas, antes de las elecciones previstas para octubre o noviembre, y los partidos políticos están en campaña.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque, pero el brazo local del grupo Estado Islámico (EI) ha llevado a cabo recientemente ataques contra JUI-F.