Ocurrió el 10 de octubre por la noche en Trelew, cuando se desató un motín de menores en el Centro de Orientación Socio Educativa (C.O.S.E). La policía de la Comisaría del Distrito Segunda intervino en el incidente, que tuvo lugar a las 23:20 horas.
Según el informe oficial, el guardia del C.O.S.E., Cabo Hernández, fue el primero en advertir la situación y alertó a las autoridades pertinentes. De acuerdo a la notificación recibida por el jefe de turno, Sr. Uribe Alejandro, y el operador Juan Vallejos, un grupo de cuatro menores estaba causando disturbios y daños en el SUM N°1 del establecimiento. El motivo detrás de este incidente se reveló más tarde: los menores se habían enfurecido debido a que no les gustaba la comida servida en el lugar, que consistía en un guiso al que no le habían proporcionado pan.
El personal policial se desplazó al lugar y confirmó que los menores estaban provocando disturbios en el SUM N°1. Ante la situación, se siguió el protocolo establecido en casos de motines, considerando que los involucrados eran menores de edad. La Oficina Judicial, a cargo del Dr. Lagos, tomó medidas en coordinación con la Asesoría de Menores a cargo de la Dra. Silvana Galarza y la Fiscalía de Turno representada por la Dra. Paula Valdebenito.
Para controlar la situación, se requirió la intervención del Grupo Antimotines del IPP, bajo la dirección del Sargento Ayudante Rodríguez. Este equipo ingresó al edificio y utilizó disparos disuasivos, no dirigidos a personas, para disuadir a los menores y lograr que se acostaran boca abajo en el suelo, con las manos en la espalda. Esto se hizo para asegurarse de que no tuvieran objetos cortantes o armas que pudieran utilizarse contra el personal policial.
Después de esta intervención, los menores fueron esposados y trasladados fuera del edificio para evitar la inhalación de humo. Ante la propagación del humo en el interior, se decidió evacuar a los demás menores alojados en el establecimiento para prevenir posibles intoxicaciones.
Una vez que la situación se calmó, se solicitó la presencia del personal médico del Hospital Zonal. Tres de los menores, identificados como Agustín Pisano, Axel Fredes y David Mella, fueron trasladados al hospital para ser atendidos y examinados. El resto de los menores fue evaluado por el Dr. Soria, quien determinó que estaban en buenas condiciones de salud, con la excepción de uno, Agustín Montenegro, quien también fue trasladado al hospital para su atención.
Debido a la destrucción de dos celdas por el fuego, los ocho menores fueron redistribuidos en el establecimiento de acuerdo a su convivencia. Además, como medida de precaución, se reforzó la seguridad en el C.O.S.E. con la presencia de dos oficiales de policía en el edificio.
Cabe destacar que, a las 04:40 horas, los cuatro menores trasladados al hospital regresaron al C.O.S.E. en buen estado de salud. El representante del establecimiento presentará una denuncia formal una vez que se complete el levantamiento de objetos y elementos quemados o dañados durante el incidente.
Este incidente destaca la necesidad de abordar de manera efectiva la gestión de menores infractores y garantizar la seguridad en los centros de reclusión de la región. Las autoridades continúan investigando el motivo detrás de este motín y tomando medidas para evitar incidentes similares en el futuro.