Bien temprano, cuando recién iban dos minutos del partido, Juan Cruz Mallía recibió un cabezazo que le provocó un corte sangrante, lo obligó a salir de la cancha y marcó la expulsión de Curry. Más tarde el fullback reingresó con la cabeza vendada después de ese fuerte impacto. El golpe le dolió, claro, pero bastante poco poco en comparación con lo que le dejó la durísima derrota ante Inglaterra por 27 a 10. El jugador de Los Pumas se fue del estadio con un fastidio que volaba. Antes de eso, hizo una cruda radiografía de lo que sucedió en Marsella.
«Salimos a especular, a ver qué pasaba. La roja nos afectó más a nosotros que a ellos. Empezamos a pensar todo el tiempo en el resultado. Mirábamos para arriba en vez de estar seguros de lo que teníamos qué hacer. Lo sabíamos. Estábamos convencidos de eso pero no lo llevamos a la cancha», arrancó Mallía las declaraciones con mucha carga de autocrítica.
El cordobés de 26 años continuó con el repaso de flaquezas que no perdona. Si bien Argentina no llegó como favorita, sentía una ilusión compartida por todos alrededor del equipo de Michael Cheika. Decididamente, el debut mundialista estuvo a años luz de lo que imaginaba. «Hicimos una preparación espectacular. Y no pudimos trasladarla a la cancha. Fue mucho al esfuerzo, pero tuvimos impotencia. Hay que hacer mucha autocrítica, esto no puede volver a pasar».
Lejos quedaron aquellos primeros tres puntos con que Argentina había comenzado arriba en la chapa. Poco a poco, a pesar de contar con un hombre más, el equipo fue cayendo en un pozo por virtudes ajenas y por una gran cantidad de equivocaciones propias. Le faltó reacción, cometió fallas groseras. Fue superado siempre. Apenas resultó un aliciente el try sobre el cierre.
«No pudimos ganar en el contacto. Nos desesperamos. Nos encontramos con errores no forzados. Son cosas que debemos corregir . Esto recién empieza», agregó Mallía, con enorme sed de revancha de cara al cruce del viernes 22, frente a Samoa.
La palabra del capitán de Los Pumas
Julián Montoya, el capitán, también expresó lo suyo. No fue tan categórico como su compañero, aunque se mantuvo en la misma dirección de disconformismo sobre todo por la imagen que dio el conjunto. «No hicimos un montón de cosas que teníamos que hacer. Inglaterra nos planteó un partido de posesión. Nos ganó los rebotes, pateó mucho, metió tres drops seguidos. Tenemos que mejorar para lograr lo que queremos en la competencia».
Julián Montoya, el capitán, fue más cauto que Malliá. Fotos Emmanuel Fernández/ enviado especial – FTP CLARIN _EMA6711.JPG Z EFernandz EfernandezMontoya se disculpó con la gente argentina
El líder de Los Pumas agradeció «cómo se hicieron sentir los hinchas argentinos», les ofreció «disculpas» por el fallido estreno y pidió que «cada uno de nosotros mire hacia adentro» en pos de levantar pronto a la selección. Como punto positivo de la actuación, Montoya señalo: «Rescato que el equipo luchará hasta el final».
