La prenda más cara jamás vendida fue un uniforme de los Chicago Bulls que vistió la estrella del básquetbol mundial, Michael Jordan, por 10,1 millón de dólares.
La segunda prenda más costosa fue la camiseta con el número 10 que utilizó Diego Armando Maradona en la victoria ante Inglaterra en cuartos de final del Mundial México 1986, que fue adquirido en 9,3 millones de la moneda estadounidense.
Las camisetas vendidas las empleó Messi en los partidos contra Arabia Saudita y México en la fase de grupos, ante Australia en octavos de final, frente a Países Bajos en cuartos y con Croacia en semifinales.
La más simbólica fue la que usó en la final que el seleccionado de Argentina le ganó a Francia por 4 a 2 en los penales -en tiempo regular empataron 3 a 3- y que lo hizo tricampeón mundial.