Se suspendió el juicio que Pity Álvarez iba a afrontar a partir del 22 de febrero por el asesinato de un vecino en el barrio de Lugano. El fiscal Sandro Abraldes expuso que el cantante no está en condiciones de presentarse debido al deterioro de su salud,
La decisión se basa en que un informe pericial determinó que el exlíder de Viejas Locas e Intoxicados no se encuentra en condiciones de afrontar el juicio que se iba a realizar en seis audiencias -además de la fecha mencionada, previstas para los días 27 de febrero, además del primero, 6, 8 y 13 de marzo próximos-.
Álvarez iba a afrontar el juicio como inculpado por el asesinato a tiros del vecino Cristian Maximiliano Díaz, de 36 años, ocurrido en julio de 2018 en el barrio Samoré, de Villa Lugano.
Según la pericia, padece de “un cuadro de deterioro psico-orgánico, compatible con un trastorno cognitivo mayor”. Además, el peritaje indica que sufre un trastorno depresivo, con intensa anhedonia (incapacidad para sentir placer) y apatía. Incluso, remarcan que su capacidad de razonamiento se encuentra dañada y que su comprensión de la realidad está disminuida.
Cómo fue el homicidio por el que es acusado Pity Álvarez
El caso por el que Pity Álvarez tiene que ser juzgado ocurrió el 12 de julio de 2018 a la 1.30 frente a la puerta de acceso a la Torre 12 B del barrio Samoré, situada en la intersección de Dellepiane Sur y la avenida Escalada de Villa Lugano, en el sur de la Capital Federal.
El ex Intoxicados salió de allí junto a su novia y de repente se acercó a ellos Cristian Maximiliano Díaz, alias “Gringo”, un conocido del barrio con quien comenzó una conversación que derivó en una discusión. Según lo que reconstruyó el juez de instrucción Martín Yadarola, el conflicto se originó cuando la víctima le recriminó a “Pity” andar diciendo que él le había robado unas pertenencias de una mochila.
Según los testigos, Díaz empujó e intentó pegarle a Pity, momento en que el cantante extrajo del bolsillo derecho de la campera que vestía una pistola calibre .25 y le efectuó a la víctima un primer tiro en la cara y, luego, cuando el hombre yacía en el piso, se acercó para rematarlo de otros tres disparos también en el rostro.
Poco después, Álvarez fue hasta el estacionamiento del complejo Samoré, subió con su novia a un Volkswagen Polo y a los pocos metros le pidió a la joven que arrojara la pistola en una alcantarilla de la colectora de Dellepiane Sur. Desde allí, ambos fueron al boliche “Pinar de Rocha” de Ramos Mejía.
Paralelamente, concurrió al lugar del hecho personal policial que halló el cuerpo de Díaz así como las vainas servidas en la calle y la pistola en la alcantarilla. Álvarez estuvo casi un día prófugo hasta que el 13 de julio de 2018 se entregó en la comisaría 52, único momento en el que se refirió al hecho cuando le dijo a la prensa: “Lo maté porque era él o yo. Y creo que cualquier animal haría lo mismo”. Luego, se negó a declarar ante la Justicia.