La caliente disputa por la presidencia de Brasil, que se dirimirá entre Lula da Silva y Bolsonaro en la segunda vuelta del 30 de octubre, fue el motivo de un asesinato en las últimas horas en Brasil. Un votante del Partido de los Trabajadores fue detenido al confesar que asesinó a un amigo «bolsonarista«, con el que vivía hace 5 años en la misma casa, luego de una discusión que mantuvieron mientras almorzaban.
El trágico episodio sucedió durante la tarde de este martes, aunque recién trascendió al día siguiente. La escena del crimen fue una casa ubicada en la Avenida Santo André del municipio de Itanhanga, en la costa de San Pablo, donde los amigos protagonizaron un tenso intercambio de ideas respecto de la definición electoral del país.
El verborrágico cruce subió poco a poco de temperatura hasta que uno de ellos mató a cuchillazos al otro.
Luis Ferreira, de 42 años, se entregó a la policía luego de haber asesinado a su amigo José Mendes, de 52 años. «Actué en legítima defensa y estoy arrepentido», exoresó el detenido a la policía. Según relató, la discusión empezó cuando la víctima, simpatizante de Bolsonaro, aseguró mientras almorzaban que «todos los del Partido de los Trabajadores (NdeR: el espacio liderado por Lula) son ladrones«. Frente a esa incriminación, replicó: «Vos estás comiendo la comida que un petista compró».
Acto seguido, de acuerdo a la versión que brindó al ser interrogado, Gomes Mendes se levantó de la mesa y le arrojó una sartén y una radio. Ferreira da Silva, por su parte, le quitó de las manos un cuchillo que había agarrado y lo usó para defenderse de la pelea.
Según la información que se pudo recabar en la investigación, se podían observar al menos ocho puñaladas en el cuerpo de la víctima, más precisamente en la cara, la espalda y el cuello. El cadáver fue trasladado a la morgue para que el equipo de forenses realicen la autopsia correspondiente.
En tanto, la Policía Civil incautó el cuchillo utilizado como arma homicida y solicitó que se lleven a cabo las diferentes pericias en el lugar. Ferreira da Silva quedó detenido.
El delegado Arilson Brandao, de la División de investigaciones Generales (DIG), brindó un resumen de cómo sucedió el crimen, paso a paso: «Debido a las críticas políticas de la víctima, el sospechoso se sintió ofendido. Ambos comenzaron a discutir y derivó en agresión«.
«Uno de ellos tomó un cuchillo y, en la pelea, el autor del crimen logró atrapar el arma de la víctima y la apuñaló«, completó en una entrevista que le concedió a TV Tribuna.
Además, contó que el hombre detenido por el homicidio reconoció en su testimonio estar arrepentido: «El imputado alegó que cometió el delito con la cabeza caliente«.