La fiscal, Florencia Gómez, acusaría por infringir las leyes de protección ambiental y animal, a Ricardo Adolfo La Regina, propietario de la Estancia La Perla, de 35 años, domiciliado en Trelew.
Ocurrió en la estancia La Perla, a pocos kilómetros de Punta Clara, al norte de la reserva continental de pingüinos de Magallanes más grande del mundo. Allí se realizó un camino sin autorización y durante la maniobra provocó la muerte de cientos de ejemplares. Además, electrificó el cercado.
Ocurrió en noviembre de 2021 y para la fiscalía, la conducta exhibida por el dueño del campo fue de una «extrema crueldad hacia la vida animal en forma desmesurada».
Sin autorización previa y mediante la utilización de maquinaria pesada, se produjeron daños sobre fauna y flora silvestre del área protegida. Restos de pichones de pingüinos fueron aplastados en sus nidos mediante la utilización de maquinaria pesada.
Dicha franja atravesó un área de nidificación de pingüinos de Magallanes, incluyendo zonas de alta densidad de nidos
Al momento de realizar el trazado de los caminos, desmonte, triángulo y tajamar, “en presencia de Pingüinos de Magallanes en época reproductiva, algo totalmente desatinado, dice la fundamentación».
El lugar, patrimonio privilegiado de fauna y flora, es uno de los productos turísticos más relevantes de la provincia de Chubut, además de ser un área natural que recibe miles de visitantes de todo el mundo año tras año.