Karina Pintarelli, una mujer trans de 64 años, obtuvo el reconocimiento y una histórica reparación por parte del Estado Nacional por las violencias sufridas durante la última dictadura cívico-militar, en virtud de las detenciones reiteradas y arbitrarias con motivo de su identidad de género de las que fue víctima sistemáticamente por aplicación de los edictos policiales, se informó este jueves.
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación resolvió dar lugar al reclamo de Pintarelli quien será la primera mujer trans en obtener este reconocimiento por parte del Estado Nacional y el beneficio previsto en la Ley 24.043 para personas detenidas por motivos políticos en el contexto de la dictadura cívico-militar.
El informe técnico de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación es acorde a la posición sostenida por Karina Pintarelli y dio por probado “el ensañamiento contra las personas trans como parte de la Doctrina de la Seguridad Nacional”, precisó la organización AboSex, que acompaña a mujer desde 2018.
Asimismo, aseguró que el dictamen destacó el carácter “dinámico” de la política reparatoria integral; el rol de la Policía Federal en el marco del terrorismo de Estado y, muy particularmente, el uso de las contravenciones como herramienta represiva, y concluyó que el “…Estado asume aquí que las mujeres trans, en su encarnación del género, fueron consideradas agentes subversivos”.
En 2015, AboSex junto a más de 200 organizaciones lanzó la campaña “Reconocer es Reparar” exigiendo una ley de reparación para las víctimas de la violencia institucional por motivo de identidad de género.
En el marco de esa campaña, AboSex, la organización No Tan Distintes Mujeres LGTBQI+ en situación de vulnerabilidad social y el Observatorio de Género en la Justicia de la ciudad de Buenos Aires acompañaron a Pintarelli en la lucha por la restitución de sus derechos.
El pedido
La solicitud de reparación fue presentada ante la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación en 2020, dejando constancia de las violencias sufridas como víctima de la violencia del terrorismo de Estado, innumerables detenciones por la aplicación sistemática de los Edictos de la Policía Federal Argentina, en particular los incisos 2F y 2H a partir de 1976, figuras que criminalizaban su identidad de género.
Luego del regreso de la democracia Pintarelli fue víctima de otros episodios de violencia por parte del Estado, como “experiencias de patologización, institucionalización y marginalización”.
Este precedente es un “reconocimiento histórico de la violencia por motivos políticos y de odio de género”, señaló AboSex y consideró que el mismo “dará lugar a la reparación integral de todas las violencias institucionales que padeció”.