El crimen ocurrió en una precaria vivienda situada en Vicente Zarza y el terraplén de barrio Los Espinillos, en la ciudad de San José del Rincón, lindante con la capital de Santa Fe.
Los voceros señalaron que el acusado, que realizaba changas de albañilería y los fines de semana cocinaba pan y empanadas para vender, el domingo por la tarde había estado bebiendo vino con la víctima, a quien sorprendió robándole el producto de las ventas del día.
Según el testimonio de la hija del acusado, el hombre se ausentó de su casa para hacer un mandado y a su regreso sorprendió al vecino robándole.
Siempre de acuerdo a esa versión, los hombres comenzaron a pelear y el changarín recibió heridas en la cabeza y en los brazos, hasta que en un momento dado asesinó a la víctima con un cuchillo.
Tras ello, llevó el cuerpo al fondo de su terreno y lo enterró, al parecer para evitar que lo vea un nieto que residía en la misma vivienda, pero poco después, ya en la madrugada, dio aviso a la policía para confesar lo sucedido.
El cadáver fue retirado con la colaboración de los Bomberos Zapadores, en tanto el imputado fue alojado en la comisaría 14 de San José del Rincón.
El fiscal Gonzalo Iglesias, de la sección Homicidios del Ministerio Público de la Acusación (MPA), ordenó pericias en la vivienda, la identificación del cadáver y la realización de la correspondiente autopsia.