Fabiana Goroso es la mamá de una adolescente de 14 años que sufrió una brutal paliza por parte de otra menor de la misma edad, cuando se encontraba en una matiné que se llevó a cabo en un boliche ubicado sobre Avenida Rivadavia, en Comodoro Rivadavia.
Ese día, según relató a ADNSUR, le dio permiso para que asistiera a la fiesta con el compromiso de avisarle cuando la estuvieron acercando de regreso a su casa, pero antes de lo esperado “me llaman y me dicen que mi hija se había descompensado”.
“Cuando estaba yendo en el taxi me dicen que convulsionó, que se había desmayado y que estaba llegando una ambulancia”, afirmó angustiada. Y precisó que cuando llegó, la ambulancia ya se había retirado y su hija estaba al resguardo de una persona de seguridad del local.
“Me dicen que le pegaron y estaba en estado de shock”, recordó Fabiana.
Asimismo, contó que la agresión fue dentro del local y que quedó registrado porque “hay un video circulando en Instagram donde mi hija está tirada en el piso convulsionando y la piba le está pateando”.
Tras radicar la denuncia ante la comisaría segunda, se dirigió al Hospital Regional para constatar las lesiones. “Quedó con un chichonazo en la cabeza y la dejaron en observación”, además le realizaron una placa y una tomografía que “gracias a Dios salieron bien”.
Fabiana relató que cuando su hija se calmó contó quién había sido su agresora. “Estaba parada en una baranda y le dijo te hago el mano a mano, mi hija dijo que no y la agarró de los pelos. Con qué saña la agarra como la dejó. Gracias a Dios está bien pero le podría haber pasado cualquier cosa”, manifestó.
“Mi hija convulsionó, se desmayó y nadie hizo nada”, lamentó sobre lo sucedido.
Finalmente señaló que la agresora incluso subió estados «cagándose de risa de lo que le hizo a mí hija» y que pese a la denuncia, por ser menor, sabe que no tendrá mayores consecuencias su accionar.
“Jamás pidió perdón y con un perdón no se va a solucionar nada. Ni siquiera ha llamado para asumir las consecuencias de su acto de como esta mi hija ni ella ni la madre», concluyó.
