El ministro de Economía, Martín Guzmán aseguró la semana pasada que desde el Gobierno “trazamos un programa para la recuperación económica y para atacar el problema de la inflación”.
En tanto, el director nacional de Políticas Integradoras, Rafael Klejzer, afirmó hoy que la suba de los precios de los alimentos tienen «un alto componente político», a partir de la pulseada de los formadores de precios con el Estado para conseguir «dólares baratos que obliguen a una devaluación».
“Uno de los problemas más importantes que tenemos los argentinos y las argentinas es sin duda la inflación. Los precios tienen un alto componente de aumento en sus costos, pero mucho más alto y mucho más importante es el componente político”, señaló Klejzer en diálogo con Télam Radio.
El también referente nacional del Movimiento Popular «La Dignidad» y de la UTEP, afirmó, además, que se trata de «un precio político» que tiene que ver con los formadores de precios, «en esta pulseada que tienen con el Estado para hacerse de dólares barato y obligar al presidente Alberto Fernández a devaluar»
“Vemos claramente que es un golpe de mercado que tiene de rehenes a la mesa de los argentinos”, señaló.
En este sentido, en referencia a la guerra entre Rusia y Ucrania, recordó que “siempre hay una buena excusa para aumentar precios y disputar la renta nacional”,
El dirigente social expresó la necesidad de generar “ya un aumento general del salario”, a la vez de diseñar estrategias “a largo plazo” para que el Estado “recupere el rol soberano que le compete a la hora de planificar la producción de alimentos en Argentina”.
“No podemos quedar de rehenes los argentinos y las argentinas a la hora de precios, a la hora de abastecimiento, a la hora de ver qué calidad consumimos, porque diez empresas están jugando con nuestra vida”, concluyó Klejzer.