Este sábado tendrá lugar un eclipse solar parcial que se conoce como “luna negra”. Te contamos de qué se trata, cómo lo puedes ver y desde dónde.
¿Qué es el eclipse solar «luna negra»?
Un eclipse solar se produce cuando la Luna se ubica entre el Sol y la Tierra. Eso genera una sombra que bloquea la luz del Sol, parcial o totalmente. Cuando es parcial, como en el caso del eclipse de este 30 de abril, «el Sol y la Luna no están perfectamente alineados, así que la Luna no cubre completamente al Sol», explica la NASA.
¿Dónde y a qué hora se puede ver el eclipse solar parcial?
El fenómeno astronómico puede verse en la Antártida, el extremo sur de América del Sur y los Océanos Pacífico y Atlántico. Según el portal Space, especializado en temas del espacio, «el eclipse comenzará a las 2:45pm EDT, cuando será visible por primera vez para los observadores del cielo en las áreas con visibilidad. El momento del eclipse máximo será a las 4:41 p. m. EDT y el eclipse terminará a las 6:37 p. m. EDT».
«A medida que se pone por el oeste en la noche del 30 de abril, el Sol aparecerá parcialmente eclipsado para aquellos con cielos despejados en Chile, Argentina, la mayor parte de Uruguay, el oeste de Paraguay, el suroeste de Bolivia, el sureste de Perú y una pequeña área del suroeste de Brasil», dice la NASA.
¿Cómo puedo ver el eclipse de manera segura?
Esto es muy importante: NO puedes mirar al Sol directamente.
Cualquier atisbo del brillo del Sol no solo es incómodo, es peligroso. Mirar directamente al poderoso brillo del Sol puede dañar la retina, la parte del ojo sensible a la luz.
Incluso la cantidad más pequeña de exposición puede causar visión borrosa o ceguera temporal. El problema es que no sabrás si es temporal. Necesitas anteojos para el eclipse, que están regulados por un estándar de seguridad internacional.
Ya sea que uses las gafas de eclipse de cartón o una tarjeta de mano con un visor rectangular, la característica más importante es el filtro.
“Los filtros que tienen el estándar ISO 12312-2 reducen el brillo del sol a un nivel seguro y cómodo, así como el que se logra con una luna llena, y bloquean la radiación nociva ultravioleta e infrarroja”, dice Rick Fienberg, de la Sociedad Astronómica de Estados Unidos.
“Los filtros solares que cumplen con este estándar son casi 100.000 veces más oscuros que las gafas de sol comunes y corrientes, y esas gafas no bloquean los rayos infrarrojos”.