Entre los testimonios de la fecha estuvieron los de dos empleados de seguridad de Draw pub (lugar del hecho), de apellidos Leguizamón y Baroli; el de una médica generalista que es una de las primeras en llegar al lugar del hecho ya que se encontraba de guardia a bordo de la ambulancia; y el de otro policía que la noche del hecho prestó servicios adicionales en ese pub.
El tribunal de debate fue conformado por los jueces Mónica García, Jorge Odorisio y Mariel Suárez; el Ministerio Público Fiscal fue representado por Cecilia Codina, fiscal general y Eve Ponce, procuradora de fiscalía; en tanto que la querella fue ejercida por Lucía Pettinari y Luciana Risso, defensora Jefa y adjunta de la Defensa Pública respectivamente. Por su parte la defensa de Hernández fue ejercida por Daniel Fuentes, defensor particular del mismo y la madre de la víctima fue acompañada por profesionales del SAVD.
El hecho tuvo lugar el 15 de septiembre de 2018, cuando alrededor de las 4.50 Brian Gómez y M. P., quienes habían protagonizado una discusión dentro del pub Draw, sito en San Martín 373, fueron expulsados del mismo. Dicho local comercial contaba con dos personas de seguridad privada en el interior y en su puerta de ingreso con la presencia de dos efectivos de policía adicional, siendo estos Luis Ángel Hernández y Santiago Casner.
Una vez afuera del local comercial, M.P, su novia, su hermano y tres allegados se dirigieron por San Martín hacia 9 de Julio, cuando a la altura del comercio “Galatea modas” reapareció Gómez con intenciones de proseguir la pelea, según testigos.
En medio de la pelea, y mientras se activaba la alarma del local comercial, irrumpieron los dos policías adicionales del pub, junto con los dos guardias privados. Según Fiscalía, allí fue cuando el suboficial mayor Ángel Hernández golpeó con su tonfa a Brian Gómez en la cabeza. Se trató entonces de “un excesivo abuso de sus funciones y con pleno dominio y control de la fuerza, en razón de portar el bastón antes mencionado sin la capacitación y acreditación policial necesaria para ello”.
A raíz del golpe, Gómez perdió la conciencia y cayó al suelo sin volver a reaccionar. Los policías se retiraron del lugar, abandonando a la víctima, según testigos. Gómez moriría ocho días después en el Hospital Regional.