Se trata de Nadia Soto, de 31 años, quien desarrolla sus tareas en el sector de Corte y Conexiones.
«Me sentí sorprendida y contenta, con muchas ganas de aprender y de dejar lo mejor de mí», expresó Nadia, que es mamá de una niña, tras sus primeros días de trabajo.
La flamante trabajadora de la prestataria se desempeñó como auxiliar durante nueve años en la escuela ENET, en donde adquirió sus conocimientos.
Con respecto a su equipo de trabajo, que lo integran Maxi y Ariel, la joven reconoció que «son muy agradables, me enseñan, me tienen paciencia y me explican todo».
En cuanto a las tareas que realizó en el transcurso de estos primeros días, detalló que «realicé altas y bajas de medidores y hoy subí por primera vez a la grúa. Me sentí tranquila, porque los chicos tienen toda la paciencia».
Vale remarcar que Nadia se convirtió en la primera mujer en un espacio de trabajo de riesgo. «Estoy sorprendida y contenta porque está buenísimo tener otras experiencias, que las mujeres también se incorporen y para que seamos todos iguales, soy una más», manifestó Soto.
Tras la incorporación de la primera mujer en un área operativa, desde la prestataria de servicios reconocieron que «celebramos la apertura de espacios de trabajo para todas las mujeres, ya sea en áreas administrativas y operativas como en este caso. Cabe destacar que más mujeres trabajan en sectores relacionados, como Claudia que desde hace cinco años se desempeña en la guardia de reclamos, Patricia que desarrolla tareas de toma estado desde hace tres años y Aylén, quien es integrante de la Oficina Técnica».
«Es nuestro deseo y convicción acompañar los cambios que incluyen la perspectiva de género, quitando los estigmas sobre los trabajos que realizan o deben realizar las mujeres y apostamos a espacios que logren la igualdad de condiciones», sentenciaron desde la Cooperativa.
