Un preso se hizo pasar por un policía y habría conseguido un equipo de mediante una estafa con comprobantes falsos. Lo allanaron y lo tenía en su calabozo para escuchar música.
Ocurrió en Puerto Madryn. La Fiscalía investiga si un preso se hizo pasar por policía para cometer una “estafa virtual” con comprobantes falsos para adquirir un equipo de música con “parlantes bluetooth”.
El viernes a la mañana allanaron el calabozo donde se encuentra detenido, Lucas Miguel Entraigas (23), en la Comisaría Tercera para secuestrar un equipo de música y celulares.
El joven está en prisión preventiva por robo agravado por el uso de arma de fuego a la espera de fecha de juicio. Y posee una condena de 2020 por delitos contra la propiedad. Ahora sumará un antecedente más a su historial: será imputado como sospechoso de cometer una “estafa virtual” desde los calabozos de la comisaría.
El caso
La semana pasada un hombre publicó para vender dos equipos de música en Marketplace de Facebook. Una persona se comunicó por Whatsapp y acordaron la compra. Le dijo que le enviaría el dinero mediante transferencia y pactaron un encuentro en la esquina de Juan Muzzio y Tucumán. Al lugar se acercó una joven, que dijo ser la “sobrina” del comprador, recibió los elementos y al vendedor le llegó por Whatsapp el comprobante de la transferencia.
El hombre pensó que estaba todo bien y dio por finalizada la operación. Pero a los pocos minutos, todos los mensajes fueron eliminados. Y cuando revisó su cuenta en el banco descubrió que el dinero de la venta nunca fue transferido a su cuenta. Fue inmediatamente a la comisaría a efectuar la denuncia por “estafa”.
Investigación
La División de Investigación de la Policía comenzó una investigación. Descubrieron que para enviar los mensajes por Whatsapp utilizaban la foto de perfil de un policía de la Comisaría Tercera, encargado de vigilar a los detenidos. El hombre ya había realizado una denuncia por suplantación de identidad, porque había recibido mensajes donde lo acusaban de haber cometido estafas, entre ellas, de una PlayStation.
Fue entonces que se descubrió que estaban utilizando su imagen para cometer estafas. Y sospecharon que se trataba de un detenido, que justamente él vigilaba. En la investigación hubo un dato: El mismo día que se cometió la estafa, una joven de 19 años, que sería la pareja de Entraigas, le llevó un equipo de música portátil a la Comisaría Distrito Tercera.
En el allanamiento realizado se secuestró el equipo, Entraigas lo tenía en su calabozo y estaba escuchando música