«Desde la noche del miércoles, llegaron por distintas vías, mensajes kirchneristas al presidente. ‘Me piden que pare, pero yo no hice nada’ se enchincha Alberto. El diputado Máximo Kirchner, chimentan en su torno, llamó al presidente del cuerpo Sergio Massa para bajar decibeles y enfriar el episodio. ‘¿Por qué no me llamó a mí?’ interrogó Fernández a sus dos o tres confidentes más cercanos del elenco oficial. La candidata bonaerense Victoria Tolosa Paz transmitió a su vez una rama de olivo hacia Olivos», contó Wainfeld.
Fernández confirmó que los cambios de Gabinete ya se habían hablado con Cristina así como también ratificó que la vicepresidenta «jamás me pidió la renuncia de Martín Guzmán».
«Otros relevos habrá, cuando baje un poco la espuma. Mencionar nombres, minga: silenzio stampa. ¿Cuándo? La semana que viene, por ahí, discurre el presidente Alberto. Aunque en el vértigo existencial del oficialismo parece imposible parar la pelota durante tantos días, los rumores, las operaciones contra los ministros blanco móvil…», señaló Wainfeld en Página/12.
“Es incomprensible” repite Fernández y lanza una pregunta retórica al aire: “¿qué sentido tiene que renuncie el titular de Aerolíneas Argentinas?” que el propio Wainfeld se anima a responder: «El sentido es el pressing, el gesto colectivo».