El Senado de la Nación seguirá realizando sesiones de manera remota, como viene ocurriendo desde el año pasado en el marco de la pandemia de coronavirus, de acuerdo con un Decreto Parlamentario firmado por la presidenta del cuerpo, Cristina Fernández de Kirchner.
El DP 9/21 establece una nueva prórroga por 60 días que deberá ser refrendado por el pleno de la Cámara durante la próxima sesión, cuya fecha aún no se estableció. La última extensión del período de reuniones parlamentarias por videoconferencia se inició el 24 de junio y fue por 60 días, por lo cual venció hace una semana.
En los fundamentos del Decreto, la vicepresidenta menciona que la prórroga se repitió porque «los diferentes bloques que componen esta Honorable Cámara elevaron sus propuestas e inquietudes respecto de la continuidad de las sesiones» remotas.
Además, remarca que el sistema implementado «ha resultado exitoso a los fines de garantizar el funcionamiento (del Senado) en la presente emergencia».
Mientras las reuniones de Comisión serán celebradas mediante la plataforma Zoom (la reunión de la semana pasada en la que el ministro de Economía, Martín Guzmán, estuvo en el Palacio Legislativo se realizó de modo presencial porque el protocolo de virtualidad estaba vencido), las sesiones del pleno continuarán siendo mixtas, con un reducido número de legisladores en el recinto.
El Frente de Todos, como bloque de la mayoría, y Juntos por el Cambio, como primera minoría, están facultados para sumar en modo presencial en el hemiciclo a seis miembros cada uno.
La segunda minoría (el interbloque Parlamentario Federal) podrá sentar a dos de sus miembros, mientras que las demás bancadas podrán solicitar que uno de sus integrantes esté presente en los debates.
Los legisladores deberán informar a la Secretaría Parlamentaria con 24 horas de antelación a cada sesión la identidad de los miembros designados a concurrir en forma presencial para disponer de las respectivas medidas sanitarias, tecnológicas y de seguridad necesarias.