Pasado el cuarto de juego, ya el dominio fue de los locales y la visita apenas pudo aspirar a contragolpes aislados, los cuales no supo aprovechar. Lo contrario hizo el Fortín, que aprovecho su momento, arrinconó al Globo y lo lastimó con el tanto de Aquino, quien para celebrar tuvo que aguardar la confirmación del VAR.
Posteriormente todo fue de Vélez y antes que se consuma el primer acto, volvió a facturar: Damián Fernández apareció en soledad por el área de Huracán y firmó el 2-0 tras una jugada que se inició con errores groseros del elencos de Parque Patricios.
En el complemento, el Fortín jugó con tranquilidad. La ventaja a su favor le permitió manejar los hilos del cotejo sin sobresaltos y domino en todo momento a un rival que no estuvo nunca a la altura del partido y que con el nerviosismo en contra, poco pudo hacer.