El operativo, que habitualmente se desarrolla con el objetivo de inspeccionar y garantizar la seguridad en todas las áreas del establecimiento, fue supervisado por Elvio Terán, director del IPP; destacándose en esa oportunidad que por primera vez en la historia la sección Canes llevó a cabo distintas medidas que permitieron incautar estupefacientes, trozos de metal con filo, una máquina de tatuar artesanal, tres bombillas metálicas y un arma (tipo boleadora) con tres bochas.
En el transcurso del operativo también se contó con la participación de 14 efectivos del Grupo de Intervención Especializado (GIE).
Los resultados de la requisa general fueron informados a las autoridades judiciales correspondientes para que dispongan las medidas necesarias.