El gobierno está evaluando si un préstamo a corto plazo de bancos internacionales podría proporcionar suficientes divisas para cumplir con la meta a último momento. Sería un acuerdo de financiamiento entre varias entidades y el BCRA, respaldado por sus bonos en dólares -Bopreal- y oro.
El equipo económico no ha confirmado si el resultado de esta negociación es inminente. Con una sesión pendiente en el mercado cambiario, el Banco Central aún no ha alcanzado la última meta de acumulación de reservas y está considerando opciones como un acuerdo de recompra (repo) con bancos internacionales.
En este marco, se cierra una etapa de dos años y medio del programa Extended Fund Facility (EFF), durante la cual el FMI proveyó a Argentina los dólares necesarios para cumplir con los vencimientos del acuerdo previo, el Stand By de 2018, dado que el país no disponía de los fondos propios para hacer frente a esa deuda.
En cuanto a la meta de superávit, el superávit primario acumulado hasta agosto fue de $8,7 billones, superando ampliamente la meta programada. Este excedente fiscal, antes del pago de intereses de la deuda y que es el indicador considerado por el FMI, está casi un billón de pesos por encima del objetivo de septiembre.
Qué es lo que se viene con el FMI
Pese a que hay una meta que el Gobierno no cumplió, no se descarta que el FMI active el desembolso considerando los avances en otras áreas además de una renegociación del acuerdo.
La siguiente fase implica la devolución de u$s45.000 millones que el Estado adeuda, entre 2026 y 2032 en donde se deberá fijar un calendario de pagos.
El gobierno de Javier Milei se aproxima a las metas con un escenario que incluye la consecución de los objetivos de diciembre, marzo y junio -aunque el último aún no ha sido oficializado a la espera de la novena revisión técnica trimestral- y con una última evaluación pendiente, principalmente sobre la acumulación de divisas por parte de la autoridad monetaria.
En octubre, ya sin la presión de metas exigibles, se abrirán las compuertas de un proceso que en los despachos oficiales anticipan como mucho más lento y trabajoso: la negociación de un acuerdo nuevo que incluya financiamiento nuevo del organismo, para reforzar las arcas del Central. Y todavía se sostiene la posibilidad de unificar la novena y décima revisiones técnicas.