Con polémica por un penal no cobrado y un gol anulado por un offside controversial, Brasil y Colombia igualaron 1-1 en el cierre del Grupo D de la Copa América. Así, el combinado de Néstor Lorenzo avanzó como líder del grupo, mientras que la Canarinha quedó segunda y enfrentará a Uruguay en los cuartos de final.
Con un ojo puesto en el duelo entre Costa Rica y Paraguay -que finalizó 2-1 en favor de los de Gustavo Alfaro-, el conjunto de Dorival Júnior sabía que necesitaba al menos un empate para no correr riesgos de quedar afuera. Así, el gol de tiro libre de Raphinha a los 11 minutos de iniciado el partido se gritó con el corazón, ya que a esa altura Costa Rica ya ganaba 2-0 en el otro partido.
Sin embargo, los corazones se paralizaron en Brasil cuando, a los 18 minutos, Davinson Sánchez encontraba el empate de cabeza para Colombia. Sin embargo, tras una larga revisión del VAR (al mando del argentino Mauro Vigliano), la jugada quedó invalidada por una posición fuera de juego que, de todas maneras, parecía ser cobrada sobre un jugador que no intervenía en el gol. Aún así, el tanto no fue convalidado y las cosas siguieron 1-0 en favor de Brasil.
Como si esa polémica fuera poco, todo Brasil reclamó un penal sobre Vinícius por una supuesta infracción de Daniel Muñoz a los 41 minutos que en las repeticiones parecía existir. Sin embargo, tanto el árbitro, Jesús Valenzuela, como el VAR decidieron no sancionar la jugada con la pena máxima.
Poco después, a los 46 minutos del complemento, fue el lateral Muñoz quien completó una jugada en ataque y marcó el empate para Colombia, que así no solo rescataba el liderazgo del grupo, sino que además le daba esperanzas a Costa Rica en el otro partido.