El gobernador del Chubut, Ignacio “Nacho” Torres, y su par de Neuquén, Rolando Figueroa, firmaron este viernes un convenio con la Secretaría de Energía de la Nación para la finalización del Gasoducto Patagónico Cordillerano, que permitirá abastecer de gas a más de 12 mil familias de las provincias de Chubut, Río Negro y Neuquén.
A tal fin, el acuerdo prevé la puesta en marcha de tres plantas de compresión de gas en las localidades de Gobernador Costa y Río Senguer, que serán instaladas por las provincias de Chubut, Neuquén y Río Negro, las cuales asumirán con fondos propios el costo total estimado de 8,5 millones de dólares que supone la culminación del gasoducto, en un contexto signado por la paralización de la obra pública nacional en todo el territorio argentino.
Del acuerdo, suscripto este viernes por la tarde en la sede del organismo nacional, formaron parte además el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo; el interventor del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS), Carlos Casares; y representantes de las empresas ENARSA (Energía Argentina S.A.) y Camuzzi Gas del Sur S.A.
Gasoducto Cordillerano
Cabe señalar, asimismo, que la obra de ampliación del Gasoducto Cordillerano Patagónico se licitó en el año 2017, y originalmente preveía un plazo de ejecución de 18 meses, pero nunca fue finalizada porque desde el Gobierno Nacional no se avanzó en la instalación de los tres compresores de gas que hubieran permitido aumentar hasta un 50% la inyección del gas desde la cabecera del Patagónico.
De este modo, las citadas plantas de compresión, que durante más de seis años estuvieron abandonadas en la ciudad de Rosario, serán instaladas ahora con fondos provinciales en las localidades chubutenses de Río Senguer y Gobernador Costa, poniendo fin así a un reclamo iniciado por el propio Torres en su anterior etapa de legislador nacional.
En tal sentido, resulta necesario resaltar que el montaje y la puesta en marcha de las plantas de compresión posibilitará que se incorporen 20 mil conexiones nuevas de gas en toda la región cordillerana, garantizando así el acceso al servicio de gas a familias, escuelas, hospitales y emprendimientos productivos de una amplia zona patagónica.
Finalmente, el convenio firmado especifica también que, si bien los fondos para la finalización del proyecto habían sido comprometidos originalmente por el Gobierno Nacional, ante el actual panorama de paralización de la obra pública serán las provincias de Chubut, Neuquén y Río Negro las que asuman la responsabilidad de financiar con fondos propios la finalización de las obras postergadas, a fin de reactivar un proyecto que tiene por objetivo asegurar el adecuado suministro de gas para toda la región cordillerana.