El miércoles pasado, por la tarde, en el Hotel Lucania de Comodoro Rivadavia, el gobernador de la provincia del Chubut, Ignacio Torres, ofreció una presentación detallada sobre la situación financiera actual de la provincia, destacando que «el reclamo es justo, ya que hemos perdido miles de millones».
La Autovía Trelew-Puerto Madryn es una obra inconclusa que lleva 17 años en construcción, generando una compleja red de inversiones millonarias, promesas incumplidas, reclamos de los trabajadores de la obra y tragedias viales. A pesar de su potencial para impulsar el crecimiento de la región, se ve afectada por su estado inacabado y los problemas asociados a su prolongada ejecución.
La «Doble Trocha» es un tramo de 65 kilómetros de la Ruta Nacional N° 3 que conecta las ciudades principales de la provincia. En junio de 2006, el gobernador Mario das Neves confirmó avances positivos para llevar a cabo la obra, que sería realizada por el Gobierno Nacional a través de Vialidad Nacional. Luego se elaboró el pliego licitatorio en Vialidad Provincial, con un presupuesto inicial de $96 millones.
En 2006, la primera licitación fue declarada como «fracasada debido a precios excesivos», lo que llevó a una segunda convocatoria en 2007. En esta ocasión, los trabajos fueron adjudicados a la empresa Kank y Costilla, logrando completarse en un 60%. Sin embargo, un intento posterior de dividir la licitación en secciones durante la gestión del ex gobernador Buzzi también fracasó. Finalmente, la cuarta licitación tuvo lugar en 2017, lo que evidencia un largo proceso para llevar a cabo los trabajos.
En febrero de 2023, Vialidad Nacional anunció la finalización de la construcción de la rotonda de acceso norte a Puerto Madryn, en el cruce de la Ruta 3 con la Ruta A010 y la Ruta Provincial 4, a cargo de la empresa Rigel S.A. También se adelantó que las obras continuarían con la duplicación de calzada en el sentido sur-norte, entre los kilómetros 1410 y 1424.
Sin embargo, cuando parecía que todo estaba avanzando, en agosto, 21 trabajadores fueron despedidos por la empresa Rigel y se manifestaron en la banquina de la Ruta Nacional N° 3, quemando cubiertas pero sin cortar la ruta, para exigir su reincorporación. Ante este claro ejemplo, Ignacio Torres anunció que «vamos a presentar una ley de transparencia de obra pública con una auditoría rigurosa», revelando que «haremos el anuncio desde un lugar emblemático como lo es la Casa de Gobierno, que fue incendiada hace dos años».
Con información de AdnSur