Migue Granados logró sacar un lado nunca antes visto de Lionel Messi en una nota muy distendida. El capitán de la selección argentina e Inter Miami contó intimidades de su vida cotidiana tanto dentro como fuera del fútbol y la entrevista logró grandes números a nivel de visualizaciones. Por fuera de lo que se vio en el fragmento de 40 minutos, el humorista junto a su compañero Lucas Fridman contaron detalles del detrás de escena de lo que fue la construcción de la entrevista.
Para arrancar, el día anterior a que salga en vivo la charla Granados explicó que su principal objetivo era “humanizar” a Lionel con temas por fuera del deporte. “Estoy muy feliz, muy orgulloso. Desarmamos al monstruo Messi para llegar al chaboncito”, deslizó con una sonrisa en el rostro.
“Es una nota larga, es una nota donde simplemente lo traté como si fuese un amigo mío, que no lo es. Traté de aflojarlo, de no ser obsecuente, hasta quizás gastarlo un poco para humanizarlo, para bajarlo de ese lugar que nosotros lo pusimos. Porque el tipo no está ahí él, no es una estrella, no es un rockstar, es un tipo que está en la misma nuestra. Como lo vieron, sirviéndome una gaseosa, es eso el chabón. Pensé que iba a entrar a la casa y me iba a golpear una cachetada de energía y no pasó. No quiere decir que no me obnubile Messi. Pero a cualquiera, se los puedo asegurar, que conozcan a Messi, cuando baja la euforia que se lo cruzaron y es Messi, el tipo está en la misma altura. Es una construcción nuestra porque es el mejor del mundo, pero el loco es lo más, divino, hermoso, cálido, habla, escucha, es gentil y anfitrión”, detalló.
Más allá de esa comodidad, el humorista admitió que no se sintió bien a lo largo de la charla. “Estaba muy nervioso, como que tenía fiebre. Tenía frío”, comentó. Y complementó relatando las pausas que hubo en la entrevista: “La nota se paró dos veces y Messi me trajo rolisec (rollo de cocina) tres veces porque no paraba de transpirar”.
“El loco conoce todo, conoce a todos el chabón, nada más que no da like ni comenta, para que no le rompan las pelotas ni hagan 250 mil notas de un like. Conoce todo”, afirmó.
Uno de lo que más le llamó la atención a Migue fue la organización en un sector especial: “Messi hace todo bien. Su heladera parece el quirófano de una clínica privada. Impecable. Divino. No me animé a tocarle la pierna, es como tocar la Mona Lisa, hay una valla energética que no te deja”. La llegada de una camioneta con los tres hijos del jugador del Inter Miami fue tema de conversación en la nota y Granados contó el cruce que tuvo con uno de de ellos. “Apareció Thiago y se paró atrás de cámara. Estaba ahí con el uniforme del colegio y llegó al living de su casa. Le dije Thiaguito y él miró con una cara de ‘¿Quién es este gordo estúpido?’ Yo sólo quería hacerlo reír”, añadió entre risas.
Antes de que pueda salir al aire la entrevista, el equipo de trabajo de Leo le dio visto buena a la misma. “Cuando la vio, Messi dijo dejen todo, la pasé increíble, nos cagamos de risa”, añadieron los compañeros de Olga. Y Granados recordó el primer clip que salió en redes cuando le daba un beso en el cuello: ”Le mandamos la nota. Yo solamente voy a ver las veces que grabamos lo del beso. Y ayer vi un archivo viejo de mi padre que también le da un beso y pusieron en redes sociales que somos las primeras dos generaciones en besar en el cuello a un campeón del mundo”.
El humorista también le hizo una pregunta que incomodó a Messi y también se refirió a eso en su programa: “Una pregunta muy de varones, que le dije, muy de varón de escuela técnica que tira borrador desde el último banco, que escribe con liquid papers en los bancos, para ese público fue esa pregunta, que un pedazo de eso soy yo también. Ustedes piensen que esa nota cuando uno la termina se la manda para que la vea y diga esto sí, esto no. Hay momentos de incomodidad que yo los busqué porque, obvio, a mí me gusta eso”. Al mismo tiempo, se expresó sobre el momento en el que le pidió que le sirva un vaso de gaseosa en plena entrevista: “¡Eso fue hermoso!”.
Lucas Fridman, que también estuvo presente detrás de cámara, también dio su perspectiva de la llegada: “Nosotros llegamos nerviosos y alterados al lugar. El loco abrió la puerta, nos sacó charla mientras armábamos la técnica”. Y cerró con una interesante reflexión. “Siento que es un gran momento de él, tipo de mucha paz y mucha apertura como para hablar de cosas, y también en un gran momento de Migue. Estuvo bien que se haya hecho esperar la nota. Habla distinto, lo escuchás en otro tono, muy hermoso”, concluyó.
Fuente: Infobae