Daniel Murphy, secretario general de La Asociación de Trabajadores de la Educación del Chubut (Atech), criticó durante una charla con LU 20, a la decisión del Ministerio de Educación de la Provincia, la de adjudicar la responsabilidad de la higiene íntima de los niños a los docentes de nivel inicial.
«La preocupación es más bien en las condiciones que se está dando esta instrucción. No están dadas las condiciones de las escuelas de nivel inicial en la provincia. No hay espacios adecuados», aseguró el gremialista.
«La maestra no puede salir a cambiar a los chicos y dejar los demás solos en el aula. Lo que vemos es que el Ministerio, en vez de tomar decisiones que ayuden a mejorar la relación de la comunidad y la escuela, instala esto ahora», apuntó.
«Hasta ahora las maestras no cambiaban pañales, se llamaba a las familias para que retire el chico o lo cambie en el jardín» .
«No decimos que esto no se puede hacer, decimos que no están dadas las condiciones. Por eso rechazamos esto. No existe la instrucción directa a que el docente haga esto, pero alguien lo tiene que hacer», agregó.
«El tema es quién, cómo, en que condiciones y espacios lo hacen».
En este sentido, continuó «Planteamos que tiene que haber asistencia, más personal docente al cuidado de niñas y niños. Tenemos salas de 4 y de 5 atendidos por una sola docente. A veces hay una sola docente con 24 chicos». Y, apuntó, «Esta situación pone de manifiesto una vez más la falta de inversión educativa».
Por último, se refirió a posibles situaciones de abuso o maltrato: «No hay razón para poner bajo sospecha a ningún nivel educativo y, sin embargo, hay sectores que insisten con eso. Se toman medidas que no ayudan a eso».
«Esto se soluciona con diálogo y protocolos, donde las familias tengan a quien preguntar y recurrir. Hay fantasmas que se generan, y cuando uno ve las estadísticas cuando hay situaciones de maltrato o abusos la mayoría no ocurren en las escuelas».
«Es peligroso que se ponga en sospecha el ámbito educativo, que es justamente donde se detectan estas cuestiones. Tenemos que tener la apertura desde las escuelas para escuchar a las familias también», cerró Murphy.
