Tan solo unas horas después de que se conociera la muerte de un andinista noruego en el Cerro Aconcagua, las autoridades de Mendoza confirmaron también el fallecimiento de otra persona que trataba de escalar esta misma montaña: el estadounidense John Michael Magness, quien sufrió una descompensación a más de 6 mil metros de altura.
El hombre, de 58 años, era un veterano de guerra que trabajaba en el sector de bienes raíces, escribió un libro sobre sus años de servicio en el Ejército de su país y vivía en la ciudad de Redlans, California, junto a su esposa Angie y sus dos hijos.
Había viajado a la Argentina especialmente para escalar el Aconcagua, como parte de un proyecto organizado por la fundación Johnny Mac Soldiers, que financia becas a ex combatientes y familiares de militares, especialmente a los hijos de los caídos o que quedaron discapacitados.
De acuerdo con lo que precisó el diario local Los Andes, Magness se descompensó mientras intentaba llegar a la cumbre de ese cerro y fue asistido en el Campamento Independencia, ubicado a unos 6300 metros sobre el nivel del mar, donde le colocaron oxígeno y le brindaron los primeros auxilios.
A pesar de haber recibido ayuda, el hombre no resistió y falleció cerca de las 2 de este domingo, por lo que su cuerpo fue trasladado por una patrulla de rescate hasta la base Nido de Cóndores, para luego ser trasladado en helicóptero hasta la zona de Horcones.
En noviembre de 1998, el veterano publicó el libro “Perspectiva de piloto: otros secretos para sobresalir entre la multitud”, en el que relató su experiencia como miembro de las divisiones especiales de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, con la que participó en la Guerra del Golfo.
El hombre se había graduado de licenciado en ingeniería aeroespacial en la Academia Militar de West Point y también tenía una maestría en negocios en la Universidad de Boston.
La fundación Johnny Mac Soldiers, con la cual colaboraba Magness, se dedica a “honrar el servicio militar y el sacrificio, al proporcionar becas a veteranos y familiares de militares” y fue iniciada hace algunos años por un grupo de graduados de la universidad de West Point, en memoria de John “Johnny Mac” McHugh, quien fue asesinado mientras prestaba servicio en Afganistán.
El organismo sin fines de lucro ya ha recaudado en este tiempo unos 25 millones de dólares que fueron destinados a becas entregadas a unos 4000 jóvenes militares de todas las ramas de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos.
La muerte del andinista estadounidense se suma, de esta manera, a la del noruego Moi Oystein, de 62 años, quien también perdió la vida este fin de semana luego de descompensarse en el Parque Provincial Aconcagua.
En este caso, el hecho ocurrió en el sector conocido como La Cueva y, si bien el guía del grupo le realizó Reanimación Cardiopulmonar (RCP), el hombre murió en el lugar. Por tal motivo, un equipo de rescate intervino para descender el cuerpo.
El cerro Aconcagua es el más alto del hemisferio occidental y actualmente se encuentra en la temporada habilitada para los ascensos. Personas de distintas partes del mundo acuden para intentar hacer cumbre y la expedición requiere un alto nivel de exigencia física. El pasado 1 de noviembre se habilitó la actividad y desde ese entonces se hicieron algunos rescates, sin embargo, el caso del andinista noruego es la primera muerte desde entonces.