Mientras avanza su proceso de extradición a Chile, Facundo Jones Huala fue trasladado al Penal Federal de Esquel (Chubut).
A las 7 de la mañana, un médico certificó que el referente mapuche se encontraba en buen estado de salud; con ese aval clínico -importante porque el detenido llevaba tres días de huelga de hambre, por lo que sólo ingería líquidos- se habilitó el traslado que fue realizado por agentes del Escuadrón N° 34 de Gendarmería en varios móviles.
El líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) permaneció tres días en la comisaría N° 36 de Dina Huapi (Río Negro) y ahora deberá habituarse a la rutina de la Unidad N° 14, donde permanecerá hasta que se formalice su extradición.
La justicia de Chile aprobó ayer la primera etapa de la extradición de Jones Huala, quien estuvo prófugo casi un año hasta que fue capturado en El Bolsón.
La decisión fue tomada en una audiencia oral en la que la Fiscalía y el gobierno trasandino reclamaron la extradición del referente mapuche, mientras que su defensa la rechazó porque no estaba acreditado que esté cumplido uno de los requisitos para que sea enviado a Chile.
Ahora el caso pasará a la Corte Suprema de Justicia local para continuar con el trámite formal que habilite el traslado al país vecino.
El gobierno del presidente Gabriel Boric, a través de un funcionario del Ministerio del Interior, reclamó además que se dicte un pedido de prisión preventiva sobre Jones Huala. “Tuvo durante el proceso de investigación del delito actitudes de no cumplimiento de órdenes de la justicia, con lo que demostró poco apego a las decisiones del tribunal”.
Chile emitió una alerta roja de Interpol para que quede el líder de la RAM permanezca detenido; cuando la justicia trasandina confirme el pedido de extradición, el caso pasará a la Cancillería de ese país que hará el requerimiento formal con toda la documentación para que sea analizada por Santiago Cafiero, su par de Argentina.