Por eso los rugbiers pasan 21 horas dentro de sus celdas (que ocupan de a dos para mantener una mejor convivencia) y sólo salen al aire libre cuando los demás presos vuelven a las suyas para no cruzarse.
«Es una imposición del Estado este encierro y lo deciden desde el Poder Ejecutivo«, explicaron fuentes judiciales citadas por Telefe. Las mismas fuentes de la Alcaidía señalaron que el régimen que siguen los acusados es un «encierro cautelar extremo».
Así, Lucas Pertossi comparte celda con Blas Cinalli; Máximo Thomsen con Ayrton Viollaz; Luciano y Ciro Pertossi comparten un espacio de 9 metros cuadrados, y Enzo Comelli y Matías Benicelli, otro.
Hasta marzo de este año los ocho jóvenes se habían negado a ser sometidos a pericias psicológicas y psiquiátricas que habían sido solicitadas por la querella y la fiscalía de cara al juicio oral porque aseguraron que no confían en la investigación y que sufren «persecución mediática».
Justicia por el crimen de Fernando Báez Sosa
La fecha del juicio se logró después de que los jueces del TOC 1 de Dolores, Hilda Kogan, Luis Genoud, Sergio Torres y Daniel Soria, desestimaran los planteos de Hugo Tomei, abogado de los rugbiers, quien intentó hasta lograr que la causa volviera a foja cero para ganar tiempo para sus defendidos.
Los ocho rugbiers están imputados del delito de «homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas», y también por «lesiones leves» sufridas por amigos de Fernando Báez Sosa que estaban junto a él la madrugada del crimen.
A lo largo de la primera etapa de la investigación salieron a la luz varios videos de cámaras de seguridad y celulares de testigos -y de los rugbiers- donde se aprecia cómo fue el ataque a golpes que sufrió Fernando Báez Sosa en la madrugada del 18 de enero de 2020 a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell.
La fecha de inicio del juicio fue elegida a propósito teniendo en cuenta la feria del Poder Judicial (que dura todo enero) porque se desarrollará a lo largo de 22 jornadas con la participación de más de 130 testigos.
En la causa fueron sobreseídos otros dos jóvenes acusados de ser partícipes necesarios: Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi.