«Por suerte sin lesionados -continuó-, ya que no había ni visitantes ni gente del Parque en el lugar y el patrimonio, que son bienes no recuperables ya que estamos hablando de 10.000 años de antigüedad, está intacto».
La roca cayó «como un misil»
El funcionario dijo que se trató de una roca de entre 50 y 100 kilogramos que se desprendió del farallón, que tiene unos 120 metros entre la cumbre y el sendero, y que pareció «realmente un misil», dijo Nauta.
El director del Sitio arqueológico dijo que el domingo no hubo visitas y el personal del Parque Provincial se encontró con el sector de pasarela destruido por la roca durante un recorrido de inspección.
«Todavía estaban cayendo algunas piedras, por eso hemos decidido cerrar el sendero hasta que se estabilice esto y hacer algunos estudios en el lugar para ver si esta roca grande que cayó no desestabilizó a algunas otras», añadió.
Nauta afirmó que fue «un accidente natural» y explicó que en el lugar ubicado entre Perito Moreno y Bajo Caracoles en el noroeste provincial «tenemos una gran amplitud térmica con temperaturas de hasta 36 grados centígrados en verano y en invierno de 17 o 18 grados bajo cero».
«Hubo una nevada hace una semana más o menos y se puede haber filtrado agua, después mucha escarcha y eso rajó y se produce este efecto, algo totalmente natural», evaluó.
Nauta explicó que hace 50 años conoce el Sitio y «nunca vi una cosa semejante, desprendimientos de piedras pequeños sí, y generalmente en esta época de hielo y escarcha y sino por vientos muy fuertes, pero nunca de este tamaño», agregó.
El Sitio Cueva de las Manos está abierto todo el año, aunque en esta época invernal son pocas las visitas.