Al inicio de la audiencia, la representante del ministerio público fiscal, Julieta Gamarra manifestó ante el juez Fabio Monti (foto) que la única y principal testigo -novia de la víctima- que contaba el MPF, manifestó en una entrevista el día de ayer en sede de fiscalía, junto con los defensores particulares del imputado, que no había visto el rostro de las personas que atacaron a Daniel Fernández pero que puntualmente no había sido Pablo Ferrerya.
Según lo manifestado por la funcionaria de fiscalía, la primera versión inculpando a Ferrerya tuvo que ver con que la testigo, cuando escapó del hecho, se pudo esconder en un departamento donde había amigos de ella y al contarles lo ocurrido, éstos le adelantaron “fue el chavo, fue el chavo”, aludiendo a Ferreyra por haber tenido algún conflicto anteriormente. Luego de eso, la testigo se comunicó con su hermano contándole lo sucedido, acusando directamente Pablo Ferreyra.
La funcionaria adelantó que tal situación debilita la teoría del caso que oportunamente se había presentado, “no teniendo esta prueba directa, todo lo demás que tenemos, no es suficiente para poder atribuirle la autoría del homicidio a Pablo Ferrerya”, enfatizó.
En función de ello solicitó al magistrado el cese de la medida de coerción de prisión preventiva más allá que la investigación penal preparatoria continúa.
Principio de objetividad
Los defensores particulares, Martín Castro y Rodrigo Miquelarena, -ya habían solicitado el miércoles pasado la libertad de su asistido por este hecho nuevo- agradecieron la objetividad y responsabilidad del MPF en el caso. También solicitaron la libertad de su representado.
Familiares de la víctima presentes
Para finalizar, el juez Fabio Monti consultó a los familiares de la víctima, que se hicieron presentes en la audiencia para saber si tenían dudas respecto de lo manifestado por la fiscalía. Luego dispuso la libertad de Pablo Ferreyra, más allá de seguir vinculado a la causa hasta que la fiscalía decida sobre su situación procesal. Destacó el principio de objetividad del MPF en cuanto al reconocimiento ante el juez que su caso se ha debilitado.