Fiscalía y defensa se pusieron de acuerdo a cómo ocurrieron los hechos y con el aval además de la víctima, un caso de violencia fue recalificado y Adrián Llalataque fue condenado a tres años de prisión por apuñalar a Tomás Millanahuel en un caso ocurrido en julio del año pasado en un inquilinato de la calle Vachina de Rawson.
Si bien las partes acordaron realizar un juicio abreviado ante el juez Gustavo Castro, este se tomará cinco días para el dictado final de su resolución que incluye la libertad condicional para Llalataque, ya que lleva ocho meses detenido.
La calificación original y provisoria, sujeta al devenir de la investigación, fue la de “homicidio simple en grado de tentativa en carácter de autor”. Pero finalmente, el equipo de investigadores encabezados por el fiscal general Fernando Rivarola, con acuerdo de la defensa y garantizado por la jueza del proceso, Ivana González definió el hecho como “lesiones graves dolosas”, con una pena menor. El imputado fue asistido por el defensor oficial Miguel Moyano.
El sujeto apuñaló a un joven de 19 años de edad en un incidente de singular violencia ocurrido en julio pasado en el exterior de un inquilinato de la calle Vachina de la ciudad de Rawson, en cercanías del cuartel de Bomberos Voluntarios.
En su fuga, tras ser agredido por allegados a Millanahuel, el imputado intentó ocultar el cuchillo que usó, en el interior de un contenedor de basura, cerca de una concesionaria de autos de la calle Conesa. La investigación contó con filmaciones de cámaras instaladas en la vía pública, además de varios testimonios y pericias.
El incidente tuvo otros protagonistas, insultos, golpes de puño y los puntazos contra de Millanahuel. En un auto particular trasladaron a la víctima a la vez que se producían daños en la casa de Llalataque. En pocos minutos Llalataque fue detenido.