A la edad de 60 años, Raúl Oscar “Chino” Arturo dejó de existir. Politicos, comunicadores, periodistas y sus familiares lloran su partida.
Además, en los últimos años encabezó la causa de donación de órganos, en las radios de Comodoro se lo escuchaba decir: «Sabías que fue mi hermano quien me donó un riñón» y por supuesto ésta parte de su vida, además de hacerlo un vocero de la causa, lo hacía más vulnerable al Covid-19, la enfermedad que se lo llevó del mundo terrenal.
El «Chino» además de ser un tipazo para cualquiera que lo conociera, era un divulgador de su conocimiento: fue profesor de cientos de fotografos más contemporáneos que hoy lo despiden con profunda tristeza. Durante varios años, brindó un taller gratuito en el Centro Cultural de Comodoro.
Una mirada única de la realidad la pudo reflejar a través de su cámara, que luego eran publicada en los diarios más reconocidos del Chubut y esas imagenes, entre otras, acompañarán por siempre a sus seres más queridos, su esposa e hijos.