El Gobierno de la Ciudad incorporó al Boti, el chatbot a través del cual las ciudadanas y ciudadanos porteños pueden hacer diferentes consultas, un sistema que permite ayudar a detectar casos positivos de coronavirus a partir de la tos.
En el 2020, el gobierno porteño inició una investigación en la que recolectó, previo consentimiento, 140.000 audios de personas con diagnósticos positivos o negativos covid-19.
Tras la finalización del estudio, el sistema fue incorporado al Boti como una herramienta más para combatir la pandemia: ahora, además de responder un cuestionario por WhatsApp, la persona puede grabar y enviar un audio con su tos.
Una vez recibido el audio, IATos –nombre con el que fue bautizado el sistema– analiza el sonido a través de inteligencia artificial. Si coincide con los patrones de los casos positivos recolectados en el estudio, le recomienda a la persona hacerse el test de covid-19.
El objetivo, explicó el Gobierno de la Ciudad, es detectar más casos positivos que de otra manera no hubieran ido a testearse: en la prueba piloto, sobre un total de 2.687 audios evaluados, IATos recomendó realizarse el testeo a 554 personas; de esas 554, 436 resultaron positivas en su hisopado y 118 fueron negativas.
Según precisó la Secretaría de Innovación y Transformación Digital de la Ciudad, IATos funciona a partir de una red neuronal de inteligencia artificial que es capaz de clasificar sonidos de voz, respiración y tos.
«Está basado en algoritmos de aprendizaje automático (…) El algoritmo identifica el patrón sonoro que discrimina qué personas pueden tener la enfermedad y cuáles no», indicaron fuentes de la cartera, quienes aseguraron que la efectividad en la predicción es del 86%.
La investigación
El estudio, que fue aprobado por el Comité de Ética del Hospital Elizalde y ya cuenta con antecedentes en otros países, posee «la base de datos de toses positivas y negativas recolectada más grande del mundo».
Además, destacaron las autoridades, es un sistema de dominio abierto, es decir, está a disposición de toda aquella persona o institución que lo requiera.
“Innovar es aprovechar la tecnología para mejorar la vida de los vecinos y vecinas. Eso estamos haciendo a través de este proyecto de inteligencia artificial y en cada oportunidad que tenemos para generar herramientas basadas en las últimas tecnologías», señaló al respecto Diego Fernández, secretario de Innovación y Transformación Digital de la Ciudad.
En la pandemia, sumó en el mismo sentido Felipe Miguel, Jefe de Gabinete, «Boti fue una herramienta clave y la seguimos desarrollando. El uso de inteligencia artificial para hacernos la vida más fácil ya es una realidad en la Ciudad». De acuerdo a las cifras aportadas por la administración porteña, en julio de 2021 Boti superó las 5.000.000 de conversaciones. En enero de 2022, en pleno pico de contagios de la tercera ola, duplicó el número, con más de 11.000.000 interacciones en un solo mes.
Cómo funciona el sistema
Cuando una persona inicia una conversación con Boti en Whatsapp porque cree que tiene coronavirus –se registran unas 3.000 consultas diarias de este tipo–, el sistema despliega una serie de preguntas, entre las que se incluyen si siente «falta de aire» o «dificultad para respirar».
Después, Boti pregunta si la persona pertenece a algunos de los grupos considerados de «riesgo» y sobre el resto de los síntomas. Luego, el interrogatorio se centra en los posibles contactos estrechos.
Una vez que finaliza el cuestionario, Boti determina si es necesario utilizar la herramienta para evaluar la tos y, en ese momento, ofrece la opción de hacerlo. Por último, de acuerdo al análisis que hace el sistema, indica si es necesario que la persona concurra a un centro de testeo.
«Es importante dejar bien claro que no es un diagnóstico, es una recomendación para que la gente se haga el testeo si la tos que graba es compatible con las registradas con covid positivo», dijo Daniel Ferrante, subsecretario de Planificación Sanitaria y Gestión en Red del ministerio de Salud porteño.