En horas de la tarde de este martes se fueron desarrollando las últimas jornadas del juicio oral y público donde se investiga la presunta estafa en la venta de terrenos pertenecientes al Instituto de Seguridad Social y Seguros del Chubut y en el cuál están imputados los policías retirados Juan Carlos Rossi y Leandro Nelson Quilaleo, ex Presidente y Tesorero de la Mutual Policial y el escribano Pablo Fossati.
El evento se desarrolló en la sala de cámara penal ubicada en el sexto piso de los tribunales en Trelew, siendo el tribunal unipersonal constituído por la Jueza Ivana González.
Numerosos testigos convocados por Fiscalía, representada por Gustavo Núñez y el funcionario Rubén Kholer, dieron sus testimonios ante las partes participantes. Uno de ellos fue Miguel Arnaudo, que hasta hace poco fue titular del ISSyS, cargo al que accedió en marzo de 2018. Allí explicó los mecanismos que habitualmente se efectúan en el organismo para autorizar la firma en la suscripción de una escritura, que necesita de una aprobación de la asesoría legal y la posterior resolución de todo el directorio, para luego solicitar un turno para la firma.
En lo que refiere a la nota 4981/18 señaló que el directorio no intervino en ningún modo en la transferencia de dominio. Respecto de un bien inmueble, manifestó Arnaudo que es competencia del directorio tal procedimiento y de tal forma se hace una reunión de los integrantes, se procede a redactar un acta donde consta la toma de decisión y se registra la resolución por parte de todos los intervenientes.
Mas adelante depusieron los involucrados como compradores de los terrenos en venta por parte de la asociación mutual policial. En ese aspecto, declararon un comerciante que ofició de firmante del boleto de compra venta, a pedido del verdadero comprador, un chino que le solicitó el favor de figurar por ser extranjero. En la lectura del boleto se da a trascender que el precio es de 175.000 dólares que se abonan 100.000 en el acto y el resto en cuotas, recordando que solo estaban presentes él, el comprador chino y el escribano Fossati al momento de la firma.
También depuso el corredor inmobiliario que fue quien ofreció los terrenos en venta y contó como se relacionó con Juan Carlos Rossi y Pablo Fossati. Con el primero trataban todo lo pertinente a la autorización de venta de los terrenos ubicados en una manzana donde había alrededor de 8 o 10 lotes. En tanto, el testimonio del comerciante chino ratificó lo expresado por los anteriores, indicando que accedió a la compra a través de un ofrecimiento de la inmobiliaria y le pidió a un amigo que firmara boleto por ser extranjero. Dijo que había hecho la entrega del dinero acordado en el círculo policial a una señora y señalándolo expresó que también se encontraba Nelson Quilaleo.
Después fue el turno del contador José Velázquez, integrante del equipo técnico multidisciplinario de la procuración general, quien dio detalles acerca de la revisión de documentación y libros de balance perteneciente al círculo policial y que fuera secuestrada durante los allanamientos.
TESTIMONIOS DE PERJUDICADOS
El testimonio de los perjudicados con la venta de terrenos se constituye en una de las partes centrales de estas jornadas. Cada una de las ocho personas que pasaron por la sala contaron la manera en que fueron contactados, muchos de ellos asociados a la mutual policial. Una mujer que es empleada policial hace nueve años dijo que llamó al enterarse que había terrenos en venta, ubicados en Pellegrini y López y Planes, reconociendo haber sido atendida por Rossi, quien le expresó que aún quedaban unos tres terrenos para la venta.
Habló sobre su ilusión al estar inscripta en el instituto provincial de la vivienda hace diecisiete años, siendo mamá soltera y teniendo una hija con discapacidad: “nunca había tenido un beneficio”, señaló. Lo cierto es que la hicieron completar papeles y le dijeron que la cuota rondaría los 4000 pesos que serían descontados por recibo de sueldos. Manifestó que eso significaba un esfuerzo enorme porque viajaba cada tres meses a Buenos Aires por la hija y todo se tornaba terrible, pero era la ilusión por una casa, así que se privaron de cosas para firmar por el contrato por el terreno.
Sin embargo la firma se hizo en agosto de 2016 con compromiso de entrega de vivienda en 2019 y supuestamente en octubre se comenzaría construir, pero en la realidad nunca siquiera llegó a ver un plano: “todavía no tengo casa, jugó con los sueños de nosotras, nos mintió una y otra vez. Yo iba todo el tiempo al círculo policial y un día Rossi se violentó cuando le pedí las medidas del terreno…”, aseguró la damnificada. Dijo que la cuota se la descontaban por recibo y figuraba como gastos círculo policial, como que la hubiera gastado en fideos.
Otra testigo agregó que se realizaban reuniones con Rossi, Quilaleo y Mónica que alguna vez las citaron para decir que estaba todo bien, ya que se murmuraba que aparentemente existía una estafa con los terrenos. Aseguró que cayó sobre el asunto cuando los vio entrar esposados.
CONTINUIDAD
El Juicio oral y público continúa con la convocatoria de testigos por parte de la defensa, estimándose que en los próximos días se podrá dar lugar a los correspondientes alegatos. Cabe recordar que por la parte acusatoria, además del Ministerio Público Fiscal se encuentran los querellantes Mateo Rossio y Pablo Aguilera por Seros, y la defensa es ejercida por Humberto González en representación de los imputados Rossi y Quilaleo, mientras que Fossati es defendido por Jorge Rubiolo y Sobielarski.