La docente de la Escuela 67 de Ñorquinco sur en Cushamen, Rosana Arias, habló sobre las dificultades que traviesan los alumnos de las escuelas del interior de Chubut, donde no se cuentan con los servicios de telefonía ni electricidad necesarios para llevar a cabo clases virtuales en medio de la pandemia.
«La ministra (de Educación Florencia Perata) dice que la virtualidad funciona de maravilla y no es así. El 2020 para esta escuela fue caótico. La mayoría de los docentes que trabajamos acá somos de otras localidades», dijo. Y cuestionó que «La virtualidad no existe porque nuestros alumnos no tienen luz eléctrica. Las computadoras de nuestra escuela no tienen mantenimiento».
Asimismo, expuso que «Los alumnos que viven en el campo no tienen ni luz, ni internet ni señal de teléfono. Las escuelas que están en una zona más urbana los chicos pueden tener la posibilidad de llegar en remis o colectivo de línea, nuestros chicos no. Tenían el transporte escolar y ya no».
En diálogo con FM Cadena Tiempo, Arias indicó que este año el Ministerio se desvinculó de toda la parte de transporte «y de eso se ocupa la Dirección de Transporte y hasta el día de hoy no tenemos respuestas. Nuestros alumnos no pueden llegar a la escuela. Además desde el año pasado estamos solicitando la presencia de obras públicas. Tenemos una escuela que está en serio peligro de derrumbe», advirtió.
Y por último, afirmó que hay una situación de abandono de las escuelas rurales «Nadie viene a resolver nada. En este estado de abandono es en el que vivimos acá en la escuela 67. Es una escuela que está olvidada y mucho tiempo antes de la pandemia. Hay caminos que no tienen mantenimiento, es difícil llegar acá sin romper algo en el vehículo. Tenemos alumnos que viven a 30 km de distancia y sus padres ni tienen caballos, porque eso implica tener que alimentarlos y no están en condiciones de hacerlo. Creemos que el Gobierno tienen que resolver el transporte escolar para los chicos», puntualizó.